Muy oportuna fue la claridad que el día Martes 18 de Marzo hiciera en plaza pública el aún impune CRIMINAL DE LESA HUMANIDAD, usurpador de la presidencia de Colombia, y convicto por terrorismo Petro Urrego, acerca de lo que no aprenden a hacer los de la derrotada pandilla narcoparamilitar de la izquierda colombiana m-19.
La naturaleza pertinente y esencial que considero tiene el hecho que este delirante y aún impune GENOCIDA manifestara en público que “hablar carreta” no hace parte de lo que se aprende en la pandilla m-19, que ese asunto de decir mentiras, de ofrecer imposibles y de hablar estupideces sin sentido para embaucar a menguados mentalmente se lo confían al único talento natural que tienen todos los fracasados, improductivos y resentidos criminales de la izquierda como él, radica en que dejó en el aire una muy importante interrogante. A raíz de esta admisión, es altamente probable que aquellos quienes desconocen u olvidaron la atroz, imperdonable y aún impune VERDAD histórica acerca del criminal trasegar del m-19, se formulen la siguiente interrogante: ¿Entonces que es lo que aprenden a hacer los derrotados pandilleros como Petro Urrego en el m-19?
Como además de investigar y conocer al respecto, también tengo denunciado penalmente a nivel internacional y a nivel doméstico a este sujeto Petro Urrego, aprovecharé esta columna de opinión para enterar y recordar al lector acerca de algunas de las aún impunes atrocidades que aprenden a ejecutar con macabra excelencia esos derrotados infames del m-19.
En el m-19 de Petro Urrego fundado por, entre otros aún impunes GENOCIDAS, Everth Bustamante García, José Otty Patiño Hormaza, Vera Grabe Loewenherz, Antonio José Navarro Wolff, Afranio Parra Guzmán, Rosemberg Pabón Pabón, y Carlos Duplat Sanjuán, se aprende a violar todos los Derechos Humanos de la población civil a sabiendas que el 99% de las conductas criminales por ellos ejecutadas son consideradas desde 1948 INFRACCIONES GRAVES CONTRA EL DERECHO INTERNACIONAL HUMANITARIO (DIH), DELITOS ATROCES, CRÍMENES DE LESA HUMANIDAD (CONTRA LA HUMANIDAD), GENOCIDIO, y CRÍMENES DE GUERRA.
En el m-19 de Petro Urrego se aprende que los CRÍMENES DE LESA HUMANIDAD, el GENOCIDIO, y los CRÍMENES DE GUERRA son las conductas de mayor trascendencia para la comunidad internacional por cuanto tienen un efecto prolongado, negativo y desestabilizante sobre la sensación de seguridad de las naciones y de sus ciudadanos. Como en el m-19 de Petro Urrego se aprende que esa sensación adversa perdura decenas de años después de haber sido cometidas las atrocidades, y que esa sensación adversa afecta a muchas generaciones, aprenden que justamente para eso deben seguirse cometiendo, para que el terror por ellos desatado tenga efectos e impacte de manera irreparable e imborrable incluso en el futuro de la población civil. De esto siguen dando ejemplo y lo siguen enseñando los del m-19.
Tanto el aún impune CRIMINAL DE LESA HUMANIDAD y usurpador de la presidencia de Colombia Petro Urrego, como sus derrotados camaradas Germán Ávila Plazas, Carlos Alonso Lucio, Carlos Ramón González Merchán y Manuel Alberto Casanova Guzmán, entre otros infames, se aseguran que en el m-19 se aprenda a derrochar menosprecio y desconocimiento por los Derechos Humanos de la población civil de diferentes naciones, así como por el Derecho Internacional Humanitario – DIH. Dicha conducta intencionalmente fratricida se ha visto reflejada en los actos de barbarie ultrajantes para la humanidad que aprenden a cometer y que ya han ejecutado en Colombia, en Panamá y en Ecuador durante sus décadas de criminal, enfermiza, narcoparamilitar y autoproclamada “lucha revolucionaria”.
Así la tal ”lucha revolucionaria” no sea más que un fracasado y fratricida accionar criminal cuyos únicos resultados son muerte, violencia, sangre y destrucción, además del temor que de manera estratégica e intencional se infunde en la comunidad colombiana e internacional, Petro Urrego y sus asesinos camaradas se aseguran que en el m-19 se aprenda a causar muerte, destrucción y miseria en las vidas de los desafortunados miembros de la indefensa, inocente y desarmada población civil que se cruzan en su camino; Con esto también se ayuda a los del m-19 a sacarle provecho a esa miseria, a ese resentimiento, a ese odio, a esos complejos, a esos trastornos, a esas desviaciones y a esas limitaciones cognitivas que siempre han llevado en su interior.
Tanto María Rosalba Vásquez Martínez, Luis Francisco Otero Cifuentes, Aliz María Salazar Salazar como Gustavo Francisco Petro Urrego, se aseguran en el m-19 se aprenda a que para poder lograr sus enfermizos y delirantes propósitos de hacerse al poder en Colombia y mantenerse en él, en cada uno de sus actos terroristas debe causarse la mayor cantidad de muertes posibles, generar la mayor destrucción factible, y aterrorizar a la mayor cantidad alcanzable de indefensa, inocente y desarmada población civil. Lo anterior por cuanto la definición de víctima conforme al Derecho Internacional Humanitario – DIH es “toda persona que haya sufrido daños, individual o colectivamente, incluidas lesiones físicas o mentales, sufrimiento emocional, pérdidas económicas o menoscabo sustancial de sus derechos fundamentales, como consecuencia de acciones u omisiones que constituyan una violación manifiesta de las normas internacionales de derechos humanos o una violación grave del derecho internacional humanitario”. ¿Ahora entiende el lector porque los ataques de estos criminales son masivos, indiscriminados, irracionales, bárbaros y absolutamente terroríficos? En el m-19 de Petro Urrego se aprende que su criminal propósito es el de causar muerte, dolor y destrucción a gran escala para sí poder aterrorizar a la mayor cantidad posible de seres humanos.
Con miras a consolidar su nombre como criminales a los que se debía temer tanto o incluso más que a los Nazis, tanto Petro Urrego como sus camaradas del m-19 Jesús Arjaid Artunduaga, Anaí Ucué y José Yamel Riaño, entre otros, se aseguran que en el m-19 se aprenda a proceder de manera intencional, criminal, infame y hasta ahora impune, despreciando, burlando y violando de manera sistemática quince (15) de los treinta (30) Derechos Humanos contenidos en la DECLARACION UNIVERSAL DE LOS DERECHOS HUMANOS que fuese proclamada por la humanidad en Paris, el día 10 de Diciembre de 1948. En el m-19 de Petro Urrego se aprende a hacer todo esto con el enfermizo propósito de burlar a la humanidad en su intento por salvaguardar los Derechos Humanos y evitar vuelva a presentarse un holocausto como el padecido durante la Segunda Gran Guerra – IIWW.
A efectos de no extenderme más de lo debido para una columna de opinión, pero enterando al lector que todo lo aprendido y ejecutado por, entre otros aún impunes asesinos, Petro Urrego, Israel Santamaría Rendón, Afranio Parra Guzmán, Blanca Inés Chavarro Rozo y Olga Lucía Chavarro Rozo, resultó en una DENUNCIA PENAL INTERNACIONAL (DPI) en su contra de 800 páginas, finalizaré la presente poniendo en conocimiento del lector que absolutamente todas las repudiables y atroces conductas criminales que aprenden a ejecutar los del m-19, se pueden agrupar en términos de trece (13) PATRONES SISTEMÁTICOS DE CRIMINALIDAD, conductas en las que además hubo perfidia.
Cuando en referencia a la derrotada pandilla de narcoparamilitares de la izquierda m-19, se puede, y se debe, hablar de PATRONES DE VIOLENCIA SISTEMÁTICA por cuanto se trata de una inocultable e inobjetable configuración estable y reconocible de acciones criminales y violentas adelantadas por individuos organizados, acciones criminales y violentas que tienen claramente definidos los siguientes cuatro (4) elementos: El REPERTORIO, es decir lo que se hace; La FRECUENCIA, es decir cada cuanto se ejecuta ese repertorio; El DIRECCIONAMIENTO, es decir contra quien se procede en cada acción terrorista; Y por último la TÉCNICA, es decir la forma como se ejecuta cada acción terrorista.
Los trece (13) PATRONES SISTEMÁTICOS DE CRIMINALIDAD que gustosa y juiciosamente se aprenden a realizar y ejecutan de manera consciente y continua Petro Urrego y todos sus camaradas del m-19 contra la indefensa, inocente y desarmada población civil, son los siguientes:
- Asesinatos selectivos.
- Ataques a poblaciones.
- Ataques con explosivos y con armas no convencionales.
- Daños a infraestructura pública (civil) y privada.
- Desaparición forzada.
- Desplazamiento forzado.
- Masacres.
- Piratería Aérea.
- Reclutamiento de infantes, de niños, de niñas y de adolescentes.
- Secuestros.
- Torturas, tratos crueles y desapariciones.
- Uso de minas antipersona y de munición sin explotar.
- Violencia sexual y de género.
Considero a lugar aclarar, para que no sean pasados por alto, que en los PATRONES SISTEMÁTICOS DE CRIMINALIDAD antes enunciados se debe incluir otras igualmente atroces conductas criminales que se aprenden a ejecutar en el m-19, y en las que se volvieron “maestros”, Petro Urrego y sus igualmente aún impunes camaradas de esa pandilla de la izquierda colombiana. Estas otras conductas criminales atroces que aprenden a ejecutar con maestría Petro Urrego y los del m-19 son: El homicidio, el exterminio (GENOCIDIO) como propósito, la esclavitud (sobre todo de mujeres, de infantes y de menores de edad), la persecución de grupos sociales por motivos políticos, económicos y culturales, las lesiones que causan incapacidad física, las lesiones que no causan incapacidad física, la perfidia, y los macabros “planes pistola”, entendidos como los asesinatos selectivos dirigidos especialmente contra los uniformados de nuestra Gloriosa Fuerza Pública y contra sus familiares.
Según los registros que lleva el Departamento Jurídico del Ejercito Nacional de Colombia, los criminales resultados de los GENOCIDAS “planes pistola”, inventados y aprendidos a ejecutar por Petro Urrego y por sus camaradas del m-19, más de 235,000 (doscientos treinta y cinco mil) uniformados de nuestras Gloriosas Fuerzas Militares, y sus familias, fueron víctimas de esta atrocidad… Es decir que sin incluir las víctimas de las otras Fuerzas Armadas ni los inocentes civiles y sus familias, más de UN MILLÓN DE CIUDADANOS COLOMBIANOS pertenecientes a este grupo social han sido víctimas de este aprendido e ininterrumpido criminal proceder de Petro Urrego y de los del m-19.
Todo lo aquí presentado es VERDAD y hace parte de lo que aprenden y ejecutan los del m-19 como Petro Urrego. Tras 4 décadas de inaceptable impunidad, desde el 2022 todo esto está denunciado penalmente a nivel doméstico y a nivel internacional, por lo que se hará respetar la LEY y se aplicará JUSTICIA a esos degenerados y a sus cómplices, gústele a quien le guste y pague quien tenga que pagar.
25/03/2025 | Por François Roger Cavard M.
