El Registrador Alexander Vega Rocha es el responsable del alucinante y desequilibrado reparto de jurados para las elecciones legislativas del 13 de marzo pasado. Gracias a la investigación hecha por la senadora Milla Romero Soto, del Centro Democrático, el país descubrió hoy una parte central de la malévola preferencia que mostró el Registrador Vega Rocha por el partido del extremista Gustavo Petro Urrego.
Las cifras que salen de la documentación oficial —de la misma Registraría—, que recibió la senadora Romero Soto, tras haber presentado un derecho de petición, muestran hasta la saciedad que los colombianos no podemos depositar ningún tipo de confianza en Alexander Vega Rocha como Registrador Nacional, funcionario encargado de organizar y vigilar, junto con el Consejo Nacional Electoral, la primera vuelta de la elección presidencial del 29 de mayo próximo.
Como lo anunció la senadora Milla Romero, el partido del candidato Gustavo Petro dispuso el 13 de marzo de 23.384 jurados en las mesas de votación de todo el país. Frente a eso, los otros partidos fueron víctimas de una patética discriminación. Estas son las cifras asombrosas: Partido Liberal: 2.582 jurados; partido Centro Democrático 1.798 jurados; Partido Conservador 6.371 jurados; Partido de la U 4.797 jurados y partido Cambio Radical 3.580 jurados.
Es decir, el partido minoritario Colombia Humana, que reúne únicamente las fracciones habituales de la extrema izquierda del país, dispuso de 4.256 jurados más que el conjunto de los otros cinco partidos mayoritarios reunidos, cuyos jurados sólo sumaron 19.128 jurados. Otro fenómeno que salta a la cara: el partido Centro Democrático, que ha elegido el jefe de Estado de los cinco mandatos más recientes, de 2002-2022, y que es considerado por Gustavo Petro y consortes como su enemigo principal, fue el que dispuso, por el querer del Registrador, el menor número de jurados (1.798).
Se puede ver en esta historia del reparto de los jurados del 13 de marzo la fuerte influencia que ejerce o, mejor, la hegemonía que impone en estos días el petrismo en la Registraduría Nacional.
Gracias a esa presencia abrumadora de jurados adictos a Gustavo Petro —y no hablemos de los testigos electorales que él pudo movilizar igualmente—, el candidato de Colombia Humana pudo ejercer una fuerte presión sobre miles de mesas de votación el 13 de marzo. Una red social llegó a decir en estos días que Petro por esa vía habría montado su propia Registraduría para los comicios del 13 de marzo.
Nadie puede cerrar los ojos ante lo que se desprende dramáticamente de ese descubrimiento y esas cifras: los resultados de las elecciones del 13 de marzo, perturbadas por miles de incidentes, en los que muchos jurados de votación cometieron actos ilegales, como el CNE y el Registrador Nacional lo admitieron, y como ha informado ampliamente la prensa colombiana, son falsas. Luego la lista de congresistas que el petrismo exhibe como gran trofeo en estos días, hablando de sus “congresistas elegidos”, carece de realidad y de justificación. Es indispensable una verificación de esos votos.
Fuera de eso, está la denuncia hecha hoy por el abogado Sergio Álzate. El presidente de Colombia Transparente, una entidad veedora privada (1), afirma que él logró “recolectar 634 archivos de pruebas con las cuales se detectaron 849 fallas” en los eventos del 13 de marzo. Su concusión: “hubo un fraude al sistema [electoral], y hubo una alteración de datos”.
Alzate denunció: “No es cierto lo que dice el Registrador que hubo un millón de votos adicionales entre el preconteo y el escrutinio, eso no es real. Él le está mintiendo al país con esas cifras”. Y agregó. “Es raro que el registrador quiera orientar a la opinión pública a decir que aparecieron 500.000 votos para el Pacto Histórico y que los otros 500 mil se le repartieron a los otros partidos, como para involucrar a todo el mundo o hacerlos sentir culpables y eso no es cierto”, añadió Alzate.
“Si no paramos eso se van a robar las elecciones presidenciales” concluyó la senadora uribista Milla Romero Soto. Horas antes, en un debate, la senadora María Fernanda Cabal había lanzado la misma voz de alerta: “Los colombianos estamos viendo que a estas elecciones se las van a robar y que el fraude lo tienen listo y no sólo con la plata del narcotráfico sino con el control que tienen hoy en la Registraduría”. Todo esto ocurre 16 días antes de la primera vuelta de la elección presidencial.
Por Eduardo Mackenzie | @eduardomackenz1, 13/05/2022
Nota.- Los subrayados al texto son nuestros.