Terroríficos indicios

Por: Luis Alfonso García Carmona

Podemos afirmar sin temor a equivocarnos que los últimos dos años se han convertido para los colombianos en la peor pesadilla de nuestra historia, merced a la pésima gestión de la extrema izquierda en el ejercicio del poder.

Muchos incrédulos sobre la gravedad de la crisis terminaron por convencerse  de la triste realidad que atravesamos y ahora expresan masivamente su rechazo al régimen  en las marchas de protesta, en los escenarios deportivos y artísticos coreando el “Fuera, Petro” y apoyando en las encuestas la opinión desfavorable sobre Petro y su gestión.

Pero lo que pocos imaginaron es que la insana mente del tirano ha programado de manera audaz la toma inmediata de todos los poderes para llevar a cabo su planeada “revolución” en forma inmediata, asegurando la utilización de todos los medios lícitos e ilícitos, como enseña la cartilla marxista. Pecan de la más candorosa ingenuidad quienes aún piensan en derrotar a Petro en el 2026, ignorando que su plan consiste en hacerse ya con el poder por las vías de hecho, como lo evidencian los horrorosos indicios que pasamos a enumerar:

Primero.- Ha sido constante el mensaje del sátrapa en el sentido de que las élites no lo dejan gobernar, que él irá hasta donde diga el pueblo, y que reformará la Constitución sin cumplir los requisitos vigentes, pues importa más el contenido que las formalidades. Han advertido tanto él como sus áulicos que el “cambio” que se proponen no es posible cumplirlo en 4 años, lo que significa abrir la puerta a una reelección que por el momento está prohibida en la constitución vigente. Un proyecto de la senadora Isabel Zuleta propone la reelección de Petro.

 Segundo.-  Ha estado orientado el mandato del presidente-guerrillero  a continuar agitando la lucha de clases, como lo hace desde su época de militante del MRL y a incentivar lo que llama el “estallido social”, lo cual es un absurdo siendo él quien ocupa el más alto cargo del Estado. Ese clima de inestabilidad social es el que necesita para justificar el zarpazo a la totalidad de los poderes. Para incentivar la protesta violenta garantiza que los vándalos no recibirán sanciones penales, como lo acaba de dictaminar su cómplice, Luz Adriana Camargo, en su Directiva 001.  

Tercero.-  No resisten ningún análisis sus políticas para destruir los sistemas de salud y de pensiones, que colocan en grave peligro la seguridad social de trabajadores y pensionados, ni la prohibición de explotación de hidrocarburos que reduce el mayor rubro exportador de Colombia , generando de esa manera un insostenible déficit en las finanzas estatales. Sólo hay una justificación: Llevar el país a la bancarrota para culpar del desastre a los anteriores gobiernos y manipular a las masas con su imagen como el salvador de Colombia al cual hay que mantener indefinidamente en el poder.  De paso, saquear a través de sus alfiles las instituciones encargadas de administrar los inmensos fondos de pensiones y del sistema sanitario, para financiar el golpe de mano a la totalidad del Estado.

Cuarto.-    Mediante purgas al estilo “staliniano” ha desmontado las cúpulas directivas de las Fuerzas Militares y de Policía y limitado su libertad de operación, impidiéndoles adelantar acciones más efectivas para combatir el terrorismo, reducir la actividad del narcotráfico y la delincuencia en general y proteger la población civil.

Paralelamente viene este gobierno de la mentira organizando grupos irregulares como los vándalos de la Primera Línea , los gestores de paz y las guardias campesinas o indígenas. Recordemos que uno de estos grupos secuestró a 17 policías y asesinó a uno de ellos degollándolo, mientras cumplían con su deber. Cuando se solicitó al Gobierno que los ayudara con una unidad del Ejército que se encontraba cerca, Petro prohibió hacerlo y uno de sus ministros calificó el secuestro como un “cerco humanitario”. ¿En qué país pasa algo parecido y no se cae el Presidente?

Pero cuando la Justicia intervino deteniendo algunos integrantes de la Primera Línea por delitos cometidos en uno de los “estallidos sociales”, intervino el Presidente para solicitar la libertad de los encartados, desconociendo la independencia y separación de poderes que en toda democracia debe respetarse.

El apoyo de los narcotraficantes a la elección de Petro como Presidente ha tenido una generosa compensación, pues se ha detenido toda persecución al cultivo, procesamiento y exportación del alucinógeno; los cabecillas trafican con la mayor libertad sin que su labor sea entorpecida por la acción del Estado. Ya el Gobierno se niega a entregar los datos de la superficie cultivada y de los escasos resultados obtenidos con la erradicación manual. 

Fácil es deducir que esta política está diseñada para alimentar con los aportes de la delincuencia el golpe del sátrapa y contar, además, con milicias armadas que realicen el trabajo sucio, mientras soldados y policías permanecen confinados en sus cuarteles.

Quinto.-. Ya hay un centro de operaciones en pleno centro de Bogotá donde se preparan diferentes grupos afiliados a la izquierda radical y al vandalismo , listos a dar el golpe de mano , según inquietantes testimonios  como los siguientes: